Instrucciones detalladas para el mantenimiento LAMINADO Metal de los frentes
Es esencial mantener limpias las superficies laminadas, como se haría con cualquier otro material. El mantenimiento periódico es clave para preservar su calidad. No se requiere un cuidado especial; simplemente utiliza un paño húmedo con agua tibia o un detergente suave. La mayoría de los productos de limpieza y desinfectantes convencionales son adecuados para este propósito.
Para las manchas habituales
Un paño no abrasivo humedecido con agua tibia suele ser suficiente. En caso de enfrentarse a manchas más persistentes, se pueden emplear limpiadores o disolventes domésticos no abrasivos.
Cuando las manchas son particularmente antiguas o resistentes, la utilización de o un paño suave puede ser de ayuda para su eliminación.
Tras utilizar cualquier tipo de disolvente, es recomendable enjuagar meticulosamente la superficie con agua tibia y detergente, asegurándose de eliminar por completo cualquier residuo de limpiador.
Reparación de arañazos
Los arañazos sobre la superficie son irreparables. Recomendamos que trates con cuidado tus frentes:
- No cortes ni uses objetos punzantes directamente sobre las superficies. Usa una tabla protectora a la hora de cortar.
- No apoyes objetos muy calientes ni recién sacados del fuego.
Este procedimiento garantizará un cuidado adecuado y duradero para las superficies laminadas en cualquier espacio.
Si sigues teniendo dudas puedes contactar a nuestro equipo en hola@cubrodesign.com